Tratamiento del codo dislocado
El tratamiento del codo dislocado se centra en disminuir la dislocación, aliviar el dolor y restaurar la función de la articulación. Primero, los médicos examinan físicamente al paciente y pueden tomar radiografías para ver qué tan grave es la dislocación. La reducción manual es el tratamiento estándar, en el que el codo se ajusta cuidadosamente a su posición. Los productos para aliviar el dolor y las compresas frías son herramientas comunes para controlar el dolor. Para ayudar en la curación, se puede sujetar el codo con un aparato ortopédico o una férula después de la reducción. Para restaurar la fuerza y la amplitud de movimiento de la articulación, se podría sugerir un tratamiento físico. Si se desarrollan complicaciones o el caso se vuelve grave, es posible que se requiera cirugía.
Reservar una citaAcerca del tratamiento del codo dislocado
Sintomas: Un codo dislocado puede causar un dolor insoportable, hinchazón, una deformidad articular notable, movimiento restringido y problemas para mover el brazo.
Causas: Los eventos traumáticos, incluidas lesiones deportivas, caídas o impactos directos en la articulación del codo, pueden causar dislocaciones de los codos, lo que hace que los huesos se salgan de su alineación natural.
Remedios: El tratamiento para un codo desplazado generalmente implica una reducción manual, en la que un profesional médico manipula el codo para realinearlo. Para disminuir el malestar y fomentar la recuperación, también se pueden aplicar técnicas de manejo del dolor que incluyen compresas frías, analgésicos e inmovilidad con un cabestrillo o férula.
Procedimiento de tratamiento del codo dislocado
Evaluación: Para determinar el alcance de la lesión, el profesional médico evalúa físicamente el codo dislocado y también puede solicitar pruebas de imagen como radiografías.
El manejo del dolor: Antes de comenzar la terapia, se pueden utilizar tratamientos para el dolor, como compresas de hielo y analgésicos, para reducir las molestias.
Sedación: Para relajar los músculos y disminuir el dolor durante la cirugía de reducción, en algunas circunstancias puede ser necesaria sedación o anestesia.
Reducción: El profesional médico coloca con cuidado los huesos mal colocados en su lugar para realizar una reducción manual.
Inmovilización: Para sostener la articulación y promover la curación, el codo se inmoviliza con una férula, aparato ortopédico o cabestrillo después de una reducción exitosa.
Rehabilitación: Después de la inmovilización del codo, un fisioterapeuta normalmente comenzaría el proceso de rehabilitación con actividades leves de fortalecimiento y rango de movimiento.
Seguir: Programar visitas de seguimiento de rutina es crucial para realizar un seguimiento del proceso de curación, garantizar una función articular óptima y modificar el plan de tratamiento según sea necesario.