Tratamiento de la enfermedad de Peyronie
El tratamiento para el trastorno de Peyronie se centra en tratar los signos y síntomas y revertir la curvatura del pene, provocada por la producción de tejido cicatricial fibroso (placa) en el pene. Inicialmente, los métodos no quirúrgicos para disminuir las molestias, la curvatura y el tamaño de la placa pueden incluir tratamientos tópicos, medicamentos orales y dispositivos de tracción del pene. Los cambios en el estilo de vida pueden ser una parte adicional de estos tratamientos. Se pueden explorar procedimientos quirúrgicos como la incisión/escisión de placa, la plicatura uretral o la implantación de prótesis de pene si los enfoques no quirúrgicos no son efectivos para aliviar el problema o si el ángulo de curvatura interfiere significativamente con la función sexual. Para obtener los mejores resultados, también se puede utilizar una terapia combinada, que combina tratamientos quirúrgicos y no quirúrgicos. Las estrategias de tratamiento particulares están determinadas por las preferencias del paciente, la gravedad de la afección y los signos y síntomas; por lo tanto, es necesaria la consulta con un profesional médico para un tratamiento personalizado.
Reservar una citaAcerca del tratamiento de la enfermedad de Peyronie
Sintomas: Las molestias, la curvatura y la posibilidad de disfunción eréctil (DE) del pene son signos comunes de la enfermedad de Peyronie. Algunas personas también pueden desarrollar anomalías en el pene, como placa o tumores en el eje del órgano del pene.
Causas: El crecimiento de tejido cicatricial fibroso (placa) dentro del tejido del pene para la función eréctil es la causa principal de la afección conocida como Peyronie. La formación de placa a menudo puede provocar una curvatura penal junto con síntomas adicionales, aunque no siempre se comprende la causa exacta del crecimiento de la placa.
Tratos: Los tratamientos no quirúrgicos para el tratamiento de la enfermedad de Peyronie incluyen medicamentos tópicos, medicamentos administrados por vía oral y herramientas de tracción del pene que reducen las molestias, la curvatura y el tamaño de la placa. Se pueden utilizar tratamientos quirúrgicos, como la incisión de la placa o la extracción del implante de prótesis de pene, para rectificar la curvatura del pene y brindar alivio en circunstancias en las que los tratamientos no quirúrgicos son ineficaces.
Procedimiento de tratamiento de la enfermedad de Peyronie
Evaluación inicial: Un proveedor de atención médica con experiencia en urología o medicina sexual evalúa minuciosamente el estado del paciente. Para evaluar el grado de curvatura del pene y la presencia de placa, esta evaluación incluye una revisión de los registros médicos del paciente, un examen físico y posiblemente exploraciones radiológicas.
Tratamientos No Quirúrgicos: Inicialmente, se pueden usar opciones no quirúrgicas como medicamentos administrados por vía oral (p. ej., vitamina E, pentoxifilina), terapias tópicas (p. ej., gel de verapamilo, inyecciones de colagenasa) y terapia de tracción del pene para disminuir el tamaño de la placa y la curvatura del pene, dependiendo de la gravedad de los signos y curvatura.
Evaluación preoperatoria: Antes de la cirugía, el paciente se somete a evaluaciones preoperatorias, que incluyen análisis de sangre, electrocardiograma (ECG) y posiblemente estudios de imágenes adicionales para evaluar el estado de salud general y evaluar los riesgos quirúrgicos.
Procedimiento quirúrgico: Dependiendo del abordaje quirúrgico elegido, el procedimiento puede implicar realizar una incisión a lo largo del eje del pene para acceder y eliminar la placa (incisión/escisión de placa), o modificar la túnica albugínea para enderezar el pene (plicatura del pene). En los casos en que exista una curvatura severa o disfunción eréctil, se puede realizar la implantación de una prótesis de pene.
Cuidado Postoperatorio: Después de la cirugía, el paciente recibe instrucciones de cuidados posoperatorios, incluido el cuidado de las heridas, el manejo del dolor y orientación sobre cómo reanudar sus actividades normales. Se programan citas de seguimiento para monitorear el progreso de la curación y evaluar los resultados del tratamiento.
Recuperación y Rehabilitación: El paciente pasa por un período de recuperación y rehabilitación, tiempo durante el cual puede reanudar gradualmente la actividad sexual según las indicaciones de su proveedor de atención médica. Las visitas de seguimiento periódicas son esenciales para controlar cualquier complicación y garantizar una recuperación óptima.